Ni las políticas destructivas de Bolsonaro, ni las protestas de ambientalistas y defensores de derechos humanos, detienen el plan de los gobiernos de la Unión Europea y Mercosur (Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay). Tras veinte años de negociación, el Tratado de Libre Comercio (TLC) entre las dos regiones está en revisión, aceptación o rechazo de cada uno de los 27 países de la Unión Europea (UE).

Licencia para aumentar la desigualdad:

Foro en Fundación Heinrich Böll, Berlin
Los efectos potenciales del TLC, fueron tema en el marco de la “Semana Verde” de la Fundación Heinrich Böll (Partido Verde Alemán) en Berlín.

Para los países sudamericanos, el acuerdo significa una licencia aún mayor para la producción industrial de carne de res, soja y agrocombustibles, así como una mayor presión sobre los pequeños agricultores rurales. Se teme que aún más bosques secos y lluviosos sean víctimas de esta ‘turbina agrícola’. Y el acuerdo también tendría consecuencias drásticas para Europa y sus granjas, dicen los expertos de la Fundación Böll. ¿Entonces?

En el caso del tratado con Mercosur, el sector agrícola de la región sudamericana terminaría eliminando el 93% de los aranceles a productos agrícolas europeos; la Unión Europea lo haría para el 82% de las exportaciones de Mercusur. Hasta aquí el desequilibrio no pareciera considerable. Pero en el fondo hay más sorpresas.

Así comenzó el Profesor Christoph Scherrer de la Universidad de Kassel en Alemania (con la experiencia de analizar las consecuencias del tratado de libre comercio entre Europa y Estados Unidos (TTIP) que no se ratificó) a exponer su análisis y recalcar la necesidad de movilizarse al interior de Alemania, para que no sea ratificado por su parlamento.

«Mercosur ha abierto más sus mercados que la Unión Europea (UE)».

Prof. Dr. Christoph Scherrer, ICDD, Universidad de Kassel, Alemania
Caña de azúcar = etanol
Foto: Male Gringo, CC BY_NC 2.0

A partir de dos productos, la carne de res y el etanol, el Prof. Dr. Scherrer, ecónomo politico y director del Centro Internacional para el Desarrollo y Trabajo Decente (ICDD) de la Universidad de Kassel, Alemania ejemplificó las posibles implicaciones para el sector agrícola de todos los países implicados – sudamericanos y europeos- con la aplicación de dicho tratado de libre comercio.

Empieza con el proteccionismo y la denominación de orígen protegida

Una de las más interesantes utilidades que llegan a tener en estos tratados las economías desarrolladas es que pueden asegurar de antemano la ventaja competitiva que da el reconocimiento de origen de sus productos industrializados (de vieja data).

Mediante los llamados ‘Indicadores Geográficos’ o la ‘Denominación de orígen protegida’ (entiéndase, ·’Cerveza de Munich’ o ‘Jamón de Parma’, Queso Parmesano, Jamón Cerrano, etc.). Europa protegería 350 productos agricolas de denominación de orígen en sus mercados internos y en los mercados de Uruguay, Argentina, Brasil y Paraguay (Mercosur). Los países de Mercosur protegen 220, que a diferencia de los productos Europeos, en su mayoría no son conocidos en el mercado europeo: ¡desventaja!

«Se tiene la idea de que el proteccionismo comercial es para los que vienen atrás, pero en realidad, el proteccionismo actual es de aquellos que llevan la delantera y que han ganado una reputación específica, asegurando sus oportunidades en el mercado», anota el Profesor Scherrer.

Los productos alimentarios ‘sensibles’

La produccion de carne en Alemania, para Japón … ¿en qué estamos?

Carne de res fresca: la UE aumentaría el contingente arancelario ( solo un 2%) para importación de carne, “abriendo” más oportunidades para Mercosur. Sin embargo, ya Mercosur pierde la exclusividad de esa ‘generosa’ apertura, dado que hace pocos meses la competencia de Estados Unidos negoció la exportación de carne de calidad -sin hormonas- (la condición europea) con la UE.

La situación es en todo caso un disparate, porque en 2018 Europa exportó carne de res a Japón y Corea (733 millones de toneladas) y en el mismo periodo importó 341 millones de toneladas.
¿Se pregunta con razón, cuál es el sentido de esto? ¿Se trata de ofrecer alimentos suficientes a la población, o de ‘movilizar’ bienes y al final jugar al flujo de capitales?

Pero en el caso del Etanol, los intereses de los negociadores europeos son más claros y poderosos. La necesidad que Europa tiene de Etanol es incuestionable en el contexto de la «decarbonización» de la industria y la movilidad.
Consecuente con ello, la UE aumentaría 14 veces el contingente arancelario de Etanol, sumando 650 mil toneladas- y lo define como ‘contingente exclusivo para Mercosur’ con aranceles del 0% o 7%.

La Sostenibilidad no es limitante, se dialoga…

A diferencia de otros tratados de la U.E., en el contexto de este acuerdo comercial entre las dos regiones, si alguna de las partes incumple compromisos internacionales de sostenibilidad (voluntarios, cabe agregar), y se presentan problemas ambientales propios de las actividades extractivas implicadas (entiéndase básicamente en Mercosur), las partes se compromenten a «dialogar».
No habrá término a sanciones ni acciones por el estilo.

Así el debilitamiento de los marcos ambientales y laborales en el contexto de este tratado es incuestionable y se hace más evidente que estos convenios internacionales no pueden colocar barreras al comercio. La tan apreciada rigurosidad de los estándares ambientales y sanitarios europeos será ‘suavizada’ y ‘adaptada’ según las palabras del Prof. Scherrer.

Las consecuencias

Para Europa, las consecuencias se reflejan sobre segmentos productivos como el de carne, donde los productores se verán abocados a precios bajos de mercado en la región. Para los consumidores significa que hay menos seguridad respecto de la calidad de los productos.

En el caso de los países de Mercosur se profundizará el tradicional rol exportador de materias primas, el de economías extractivistas, se genera un incentivo más a la expansión de la agroindustira (con reducida participación de pequeñas empresas agrícolas) y se ampliará la superficie agrícola necesaria para producir Etanol al igual que Carne (por dar dos ejemplos de los productos implicados en este TLC ) otro factor más de la deforestación de la Amazonia, del acaparamiento de tierras, de la expulsión de campesinos del campo, de indígenas del bosque.